Crecimiento y consolidación de la certificación MOS en el Colegio Bicentenario San Damián de Molokai junto a ADAL

En Chile la educación técnico profesional se enfrenta al desafío de preparar a jóvenes para un mercado laboral cada vez más competitivo, el Colegio Bicentenario San Damián de Molokai, perteneciente a la Fundación Belén Educa, ha encontrado en las certificaciones internacionales una herramienta concreta para fortalecer la trayectoria formativa de sus estudiantes.

A dos años de haber comenzado a trabajar con ADAL Certificaciones, único partner oficial de Certiport en Chile, los resultados hablan por sí solos: el número de alumnos certificados en Microsoft Office Specialist (MOS) pasó de un rango inicial de 15 a 25 estudiantes en el primer año, a 54 jóvenes certificados en 2025. Un crecimiento que no solo refleja un esfuerzo institucional, sino también la importancia de contar con aliados estratégicos que entienden las necesidades de la educación técnica y del sector productivo.

Respondiendo a las necesidades del sector productivo

En entrevista con Juan Carlos Rocha, encargado del área Técnico Profesional y de continuidad de estudios en el colegio, la motivación de impulsar las certificaciones en Microsoft Office Specialist es clara:

"La principal motivación para certificar a los estudiantes en herramientas de Microsoft Office es responder a las necesidades del sector productivo, además de enriquecer la trayectoria estudiantil para potenciar continuidad de estudios en la educación superior", explica Rocha."

La especialidad de administración, una de las dos áreas formativas que imparte el colegio junto con telecomunicaciones, es el espacio donde la certificación MOS ha tomado mayor fuerza. El colegio trabaja con centros de práctica que son socios estratégicos y que demandan habilidades específicas de sus estudiantes, entre ellas el dominio de Microsoft Office. En este sentido, contar con una certificación internacional se ha transformado en una ventaja real para los egresados.

Una metodología que marca la diferencia

El aumento en la tasa de certificación en este segundo año no ha sido casual. Según Rocha, la experiencia del primer año permitió ajustar la estrategia.

"Visualizamos que los alumnos necesitan acompañamiento, darle valor al proceso y no dejarlos solos. Por eso, generamos un trabajo previo en aula, casi como un ‘ramo’, donde acercamos a los estudiantes a lo que son las certificaciones, en qué consisten y cómo se enfrentan a ellas. Luego, los acompañamos hasta la rendición del examen final", señala.

Este modelo metodológico se complementa con el uso de plataformas de preparación como GMetrix, que permiten simular el examen MOS y dar confianza a los estudiantes antes de la evaluación.

El resultado es claro, más de 50 alumnos certificados en un año, un número que triplica lo alcanzado en 2024.

"Cuando el equipo docente coloca una base, los estudiantes conocen la plataforma, conocen cómo funciona la herramienta de Microsoft, le dan un sentido, un propósito con casos cercanos a su realidad y con aprendizaje situado. Así, es mucho más fácil para ellos utilizar tanto GMetrix como rendir el examen de competencia final", agrega Rocha.

El resultado es claro, más de 50 alumnos certificados en un año, un número que triplica lo alcanzado en 2024.

De la innovación a un modelo replicable

El Colegio Bicentenario San Damián de Molokai no solo ha sido pionero dentro de la red de colegios Belén Educa, sino también un referente para otras instituciones técnico-profesionales.

"Nosotros partimos solitos, no a través de Belén Educa, sino con un proyecto de financiamiento respaldado por Fundación Irarrázaval, a quienes les planteamos la necesidad de que los alumnos salieran con mayores competencias. Ellos creyeron en nosotros, y tras el éxito alcanzado, Belén Educa puso los ojos en lo logrado, conociendo a nuestro partner en certificaciones, ADAL, y valorando el impacto de este proceso", explica Rocha.

Lo que comenzó como una apuesta local se ha convertido en un modelo a replicar. Hoy, la fundación Belén Educa evalúa extender la experiencia a otros colegios de su red, con el apoyo de ADAL como socio estratégico en certificaciones internacionales.

Impacto social en un contexto de vulnerabilidad

El colegio se ubica en Cerro Navia, una de las tres comunas con mayor vulnerabilidad de la Región Metropolitana. La mayoría de sus estudiantes proviene de familias donde la experiencia laboral más cercana es ayudar en ferias libres o en pequeños negocios familiares.

En ese escenario, las certificaciones MOS representan un salto cualitativo en las oportunidades de futuro.

"Trabajamos con jóvenes que muchas veces no han tenido acceso a herramientas avanzadas. Por eso, hacemos todo lo que está en nuestras manos para entregarles competencias reales, que no solo aumenten sus conocimientos, sino que sean útiles en la industria y les permitan optar a mejores empleos o a continuar estudios superiores", enfatiza Rocha.

ADAL, un socio clave en el camino de la certificación

Nada de este proceso sería posible sin el soporte de un partner certificado y confiable. ADAL, como único representante oficial de Certiport en Chile, ha sido clave en la implementación de las certificaciones MOS en el colegio.

La asesoría técnica, el acompañamiento docente, la provisión de herramientas de preparación como GMetrix y, sobre todo, la visión de conectar la educación técnico-profesional con las necesidades reales del mercado, han sido los elementos que permitieron al colegio San Damián de Molokai alcanzar este crecimiento.

"Todo este proceso se viene a instaurar como un ejemplo, y es super importante mostrarlo. ¿Por qué? Porque es necesario que más actores se sumen, que más instituciones crean en la educación técnico-profesional y participen en estos procesos, donde los grandes beneficiados son los alumnos", destaca Rocha.

Mirando hacia el futuro

El caso del Colegio Bicentenario San Damián de Molokai refleja cómo la innovación educativa, sumada al compromiso de un equipo docente y al apoyo de socios estratégicos como ADAL, puede transformar realidades.

La certificación MOS no es solo un diploma, es una credencial internacional que abre puertas. Para los estudiantes de Cerro Navia, significa la posibilidad de acceder a un empleo formal con mejores condiciones o dar continuidad a estudios superiores con un valor agregado en su perfil académico.

Desde ADAL, renovamos nuestro compromiso de seguir acompañando a instituciones que, como el colegio San Damián de Molokai, creen en la educación técnico-profesional como un motor de transformación social. Porque cuando los estudiantes cuentan con herramientas concretas y reconocidas globalmente, las oportunidades se multiplican.